vayámonos caminando ...

El sentido de perdida aun se refleja en mis pupilas dilatadas por la obscuridad, mi mente no guarda sentido de miedo o culpa, al contrario, me siento alegre y feliz de saber que la vertiente del rio se acomodo tranquila y calmada; no fue fácil, pero al parecer todo está en paz...

Camino entre neblina y gotitas de agua; mi mente aun conserva esos recuerdos gratos y placenteros, sin embargo muchos otros fueron eliminados o por lo menos guardados bajo llave en un rincón de mi cerebro. Las cataratas de mis ideas son cristalinas y rítmicas, nada pasó, todo está tranquilo. 

Hermoso el poder caminar, sacar el toque y decir: nos vemos pronto…